.

.



Hitler no nace porque una noche determinada su padre no se acuesta con la esposa ¿por qué no se acuesta con ella? ese día, en el trabajo, ha estado todo el tiempo pensando en su mujer. sale del trabajo y encuentra a un amigo, los dos van a emborracharse y el señor Hitler llega su casa como una cuba, se duerme en el suelo y no fornica con su mujer ¿por qué encontró precisamente aquel día a su viejo amigo? éste es un hombre de campo, se le rompe la reja del arado y va a la ciudad a comprar una, y allí, encuentra al señor Hitler ¿por qué se le rompió la reja del arado? porque al arar topó con una piedra. los ejemplos son tontos pero creo que sirven. los pequeños detalles pueden cambiar una vida, la historia misma.

P: pero no todo es azar. el verano o el invierno, aunque se adelanten o atrasen un poco, no ocurren al azar.

hablo sobre todo de conducta humana, pero la naturaleza puede desencadenar el azar: una tormenta me obliga a refugiarme en una choza del campo. allí hay una pastora guapa, siento el deseo y la violo. de esa violación nace Sócrates. es hijo mío (no reconocido) pero también de la pastora y de la tormenta. si en lugar de meterme en la choza me meto en una cueva, encuentro allí un oso que me devora, y Sócrates no nace. seamos menos fantasiosos ¿por qué estoy aquí tomando una copa con ustedes? yo quería estudiar música, si hubiera sido finalmente músico no estaría aquí. estoy aquí porque un día se me ocurrió ir a la Vieux Colombier a ver una película de Fritz Lang y me interesó hacer cine. pero tampoco estaría aquí si el final de la guerra de España me encuentra en Calanda. sólo me conocerían ustedes por el libro de Sadoul: "Luis Buñuel: malogrado cineasta español, fusilado por las fuerzas franquistas".

luis buñuel, del libro "buñuel x buñuel", pp. 102, 1976