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Beuys: “Todo hombre es un artista”
Réplica: “¿Pero todo hombre quiere ser un artista?”

Duchamp, al contrario [que Beuys], nunca fue un utópico.
Nada podría estar más alejado de su modo de pensar
que la creencia en la creatividad universal.

Su tipo particular de arte, el readymade,
no surgió ni de la creencia, ni de la esperanza
de que todos pueden o deberían poder ser artistas.
En vez de eso, reconoció – y bien razonablemente –
el “hecho” de que todos ya se habían transformado en artistas.